Perfecto regalo para el día del padre, el día del amigo, un cumpleaños o una fiesta especial, este porta bolígrafos es pequeño y te permitirá llevarlo a donde quieras, o simplemente tenerlo en tu escritorio para que nunca falte en él, un bolígrafo.
Materiales: Arcilla o plastilina que se sequen en contacto con el aire, mostasillones de los colores que prefiramos, un bolígrafo viejos, unas gotas de agua, y un bolígrafo nuevo para regalar con el soporte a realizar.
Procedimientos: tomaremos la plastilina que hemos comprado del color que deseemos, y vamos a moldearla con las manos hasta que se ablande, si es necesario humedecer con un poco de agua para lograr que se reblandezca. Una vez que hemos ablandado la plastilina vamos a darle la forma que queremos para nuestro porta bolígrafo, ya sea redonda, estilo bola, o cuadrada, la forma que nosotros deseemos.
Habiendo alcanzado este paso dispondremos a introducir en la plastilina un bolígrafo viejo, el cual va a dejar su marca para luego embutir el nuevo bolígrafo, cuando el soporte este terminado. Incrustaremos e la plastilina, aprovechando todavía su estado blando, los mostasillones que hemos elegido, y los ubicaremos de la manera que nos guste, adornando nuestro soporte.
Una vez terminado esto, con los dedos humedecidos alisaremos la superficie del soporte, en los lugares donde haya quedado desparejo, y antes de que se seque, con precaución, retiraremos el bolígrafo antes introducido, con pequeños movimientos de derecha a izquierda.
Esperaremos un tiempo hasta que el soporte este sólido y allí ya estará preparado para que podamos ponerle el nuevo bolígrafo y haya quedado constituido nuestro soporte para el mismo.
Ideal para regalar, o para tener en nuestros hogares.